Entre dimes y diretes el Senado de la República aprobó con 86 votos de Morena, PT y PVEM y 38 en contra del PAN, PRI y MC, la lista del Poder Legislativo de quienes serán candidatas y candidatos a ministros, Jueces, y magistrados del Poder Judicial.
Durante el proceso de selección, se instalaron por tómbola, mil 416 candidaturas, de las cuales fueron 667 mujeres 755 hombres; de estos, les corresponde al Senado 436 mujeres y 434 hombres, mientras que la Cámara de Diputados (que también aprobó por mayoría) le corresponden 225 mujeres y 325 hombres.
En esta primera sesión ordinaria del segundo periodo de la actual legislatura, morenistas, petistas y verde-ecologistas aprovecharon para acusar a la oposición de “vende patrias”, mientras que panistas, priistas y emecistas calificaron de fraude la selección de quienes formarán parte del Poder Judicial de la Federación.
Se impone mayoría en el Senado y avala listas de elección judicial
La priista Claudia Anaya manifestó que la selección por parte de Comité de Selección del Poder Legislativo es solo para los “cuates” afines a Morena.
En contraparte, el morenista Javier Corral dejó en claro la necesidad de reformar por completo al Poder Judicial, que calificó como “desahuciado” debido a la corrupción y la impunidad que lo han aquejado durante años.
“La corrupción y la impunidad forman ese tumor maligno que hoy tiene desahuciado al sistema judicial de nuestro país. El diagnóstico es claro y todos hemos coincidido en ello: vivimos un sistema judicial mórbido, insano, que exige una pronta intervención”, subrayó.
La panista Lilly Téllez acusó que se trata de un fraude porque “las vergonzosas tómbolas con sus pelotitas sólo dejaron entrar ahí a los perfiles cercanos a Morena y al chacal de Saldívar”.
De inmediato vino la respuesta de la morenista Lucía Trasviña, quien dijo que la panista “miente con manifestaciones estúpidas y de manera traidora a la patria”.
Del PT, Geovanna Bañuelos de la Torre defendió al Comité de Evaluación del Poder Legislativo Federal, correspondiente al Senado de la República, no sólo por su profesionalismo, sino también por su patriotismo en este momento de profundos cambios de nuestro sistema político mexicano.