La entrenadora Blajaith Aguilar aseguró que seguirán levantando en alto el nombre de México en los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile.
La selección mexicana de gimnasia rítmica, liderada por la entrenadora Blajaith Aguilar se dijo feliz de poder regresar a México este miércoles, en el primer vuelo de la Fuerza Aérea Mexicana que trasladó desde Israel a 143 compatriotas.
“Nos encontramos aquí, en México, contentas, felices de poder regresar a nuestro país, de poder regresar a casa”, dijo Aguilar a su llegada al país.
La entrenadora mexicana también compartió que fueron momentos complicados y aseguró que fue un vuelo muy ameno.
“Un vuelo en el que todo el tiempo estuvieron al pendiente de nosotros, nos alimentaron tres, cuatro veces durante el vuelo. Había personas embarazadas, personas con diferentes enfermedades”, narró.
Aseguró que seguirán levantando en alto el nombre de México para su próxima competencia en Santiago de Chile, en menos de dos semanas.
El pasado fin de semana, la selección difundió un video en redes sociales en el que informó que se encontraba en Israel en un campamento de preparación para los próximos Juegos Panamericanos y pidió ayuda al gobierno federal para salir de ese país.
Tras el llamado, la Federación Mexicana de Gimnasia (FMG) se puso en comunicación con las deportistas, así como con la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), el Comité Olímpico Mexicano e instituciones en Israel para mantener la salvaguarda de la delegación.
“Agradecemos a la gente que está atrás. Verdaderamente su apoyo ha sido invaluable y esperamos pronto verlos en México”, agregó la entrenadora antes de salir de Israel.
México recibió este miércoles dos vuelos con 287 connacionales (143 y 144 respectivamente) repatriados desde Israel. La primera aeronave de las Fuerza Aérea Mexicana (FAM), que trasladó a 143 mexicanos, aterrizó en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, donde se encuentra la base militar número 1 de Santa Lucía, en el Estado de México.
Los mexicanos repatriados cumplieron un traslado de casi 30 horas, luego de ser testigos directos de la guerra iniciada el sábado por el ataque del grupo islamista palestino Hamás.
CON INFORMACIÓN DE ARISTEGUI NOTICIAS
