EFE.- Un grupo de activistas ecologistas ha ocupado un terreno boscoso colindante con la gigafábrica de Tesla en Grünheide, cerca de Berlín, Alemania, para impedir que se pueda llevar a cabo una ampliación de la planta de coches eléctricos.
Según informaron los propios activistas en un comunicado, han construido cabañas en varios árboles para impedir la tala, todo ello debido al impacto de la fábrica para el agua del subsuelo de la región.
“Protegemos con nuestros cuerpos este recurso esencial para la vida, que se derrocha y contamina en favor de Tesla”, declaró Caro Weber, una de las activistas, de acuerdo con la nota.
Una de las razones de la ocupación es que el colectivo teme que no se respete el resultado de una votación no vinculante promovida por varias iniciativas ciudadanas de Grünheide, en la que los residentes de la zona se manifestaron mayoritariamente en contra de la ampliación.
Está previsto que las autoridades municipales tomen una decisión con respecto a la venta del terreno a Tesla a partir del próximo 18 de mayo.
Según la cadena local RBB, el área en cuestión es de unas 100 hectáreas, y el grupo compuesto por aproximadamente 80 personas ha erigido en un primer momento una decena de plataformas entre los árboles.