Con la participación de dos personas habitantes de la zona donde su ubica la planta de transferencia, un integrante del Ejido de Tonalá, un representante de un colectivo ecologista, dos regidores de oposición, un integrante de la comunidad universitaria del CUTonalá, dos funcionarios municipales y el titular del Órgano Interno de Control, quedó instalado el Observatorio de la Estación de Transferencia El Cielo.
Mediante cargo honorífico, los integrantes se encargarán de supervisar cómo funciona la estación de transferencia de basura de El Cielo, como parte del compromiso del gobierno municipal para no causar impactos ambientales en la zona ni afectaciones a la salud.
El presidente municipal de Tonalá, Sergio Chávez, agradeció el compromiso para vigilar la operación de la planta de transferencia: “Somos los responsables del buen manejo, primero de cerrar La Piedrera, segundo que sea un buen manejo de la transferencia El Cielo, de que es un reto, pero lo vamos a cumplir, y vamos a demostrarle a los tonaltecas que sabemos hacer bien las cosas y que no vamos a permitir que se repita la historia, como ya se repitió, en los vertederos de Matatlán y de Los Laureles”.
Las autoridades tonaltecas aseguraron que los trabajos previos que se realizaron en El Cielo permiten que esta estación de transferencia pueda ser utilizada con la tranquilidad de que la basura no permanecerá más de 48 horas ahí. Para evitar que los lixiviados pudieran infiltrarse en el subsuelo, se colocaron geomembranas que impiden que estos líquidos sean absorbidos.
El domingo 29 de enero comenzó a operar la estación de transferencia en donde camiones de la empresa concesionaria y del ayuntamiento acuden para descargar los desechos sólidos urbanos, cargarlos en góndolas y trasladarlos a los destinos de disposición final.